lunes, 29 de diciembre de 2008

Córdoba.

Enfila el callejón de los Judíos, a tu izquierda te toparás con la minúscula plaza de Tiberiades, donde se alza la figura en bronce del filósofo judío Maimónides y un poco más adelante, a la derecha está el Zoco de los Artesanos. Alrededor de un patio se ordenan los diferentes talleres y tiendas. Sigue por la misma calle y a dos pasos verás la Sinagoga.
Durante el siglo X Córdoba fue el mayor centro económico y cultural de Occidente y un ejemplo de convivencia entre diferentes culturas, judíos, cristianos y musulmanes.

Maimónides. Córdoba.

El zoco. Córdoba

Sinagoga. Córdoba.

El turista.


Con frecuencia, al caminar por las ciudades, he observado que el turista se parece a un adicto a la caza menor. Avanza entre los prodigios como un merodeador fatigado, vigilando algo, alza la cámara como si apuntara un fusil y tras el disparo vuelve a colgársela del hombro con el desinterés y el alivio de quien ha cobrado una pieza no demasiado relevante. Uno prefiere ir por ahí desarmado de cámaras y de guías, dejando al azar y al instinto el sentido de sus itinerarios y confiando a la memoria la perduración de las cosas que ve. A uno lo que le gusta, cuando ha llegado a una ciudad y se ha inscrito en el hotel, es salir a la calle para mirarlo todo con codicia indolente, rondar los lugares que ya sabe que lo esperan, perderse a la zaga de la más leve incitación, de una torre o de una palmera vislumbrada a lo lejos o de un olor a jazmines tan poderoso como la cercanía de una mujer deseada. Córdoba de los omeyas. Antonio Muñoz Molina.

martes, 23 de diciembre de 2008

Niños y adultos.


No llego a comprender por qué, siendo los niños tan inteligentes, los adultos son tan tontos. Debe ser fruto de la educación. Alexandre Dumas, hijo.

viernes, 19 de diciembre de 2008

Ausencias.


Las cosas que nos faltan, cuántas cosas. Las que quedaron en el camino o nunca accedieron a él. Quien más, quien menos, todos llevamos una filatelia de las ausencias.
Hay partidas, adioses de los que no volvieron ni volverán. Aun en las mejores y conquistadas alegrías, sobreviene de pronto un vacío y nos quedamos taciturnos, solos, tiernamente desolados.
Por suerte cuando soñamos vuelven todos, los que todavía son y los que fueron. Y abrazamos fantasmas, almas en pena y almas en gloria. Ellos nos cuentan su impiadosa sobrevida, aunque, eso sí, marcando siempre su territorio, que es sólo invierno.Su exilio tan pasivo, tan inerte, no está consolidado. Con su martirio, nos martirizamos, quizá porque sabemos que todo eso acaba en un opaco despertar. Viene entonces la fase de ojos abiertos, También llamada insomnio. Allá arriba está el cielo raso, con la araña de siempre en su rincón de redes. Nos faltan manos para acariciar, labios para besar, cintura para estrechar, cuerpo que penetrar. Todo es ausencia. Mario Benedetti. Vivir adrede.

jueves, 18 de diciembre de 2008

El Horizonte.

El horizonte es una meta inalcanzable. Como la alegría, como el dolor. Es el desafío para las utopías, la asunción de la irrealidad. No obstante, sin horizonte no habría mundo, ya que éste es después de todo una multiplicación de horizontes. Cada hombre, cada mujer y a veces cada niño, tiene un horizonte propio. Y también lo tiene cada sentimiento: el odio tiene un horizonte que es el fin de lo aborrecido, y el amor tiene otro que es la conquista del cuerpo y el alma del sujeto amado. Pero tanto el odio como el amor suelen llegar a su meta antes de alcanzar el horizonte. Tanto odiantes como amorosos quedan estupefactos ante la eterna lejanía del horizonte.
El único horizonte que por fin se alcanza es el de la muerte, pero quienes lo atraviesan nunca vuelven para contarnos lo que hay después. Con el horizonte no se juega. Se esconde en la noche sideral, pero no recordamos dónde estaba. Y cuando vuelve el alba, se burla de nosotros con su resurrección profana, inesperada.
Ni siquiera los pájaros lo atraviesan, por el compresible miedo de perder sus alas. Hay quien sostiene que el horizonte es un bramante que va de Dios al Diablo y viceversa, y que por eso nada tiene que ver con las criaturas de este mundo. Mario Benedetti. Vivir adrede.

miércoles, 17 de diciembre de 2008

La víctima y el verdugo.


Hitler fue “un genio militar incomparable” que “dotó a Alemania de orden público y de un régimen ejemplar con un sistema judicial apropiado” Quien proclama tanta admiración por el responsable del exterminio de más de seis millones de judíos se llama Moshe Feiglin y está en el movimiento por el Liderazgo Judío, y forma parte del ala más extremista del Likud, el partido conservador israelí que lidera Benjamin Netanyahu, firme candidato a ganar las elecciones legislativas del próximo 10 de febrero. ¿Quién se atreve ahora a cuestionar esa vieja sentencia que aconseja conocer la historia para no cometer los mismos errores?
Ahora bien, ¿cuáles fueron para Feiglin los errores de aquel “régimen ejemplar”? En un manifiesto que publicó hace cinco años en la página web de su movimiento, y que acaba de desaparecer de la Red en cuanto se ha visto que Feiglin será con toda seguridad uno de los parlamentarios elegidos en las listas del Likud, cuenta lo que haría “el día después” si fuera elegido primer ministro. Lo primero: rezar una plegaria de agradecimiento en el Monte del Templo de Jerusalén. Inmediatamente después sacaría a Israel de las Naciones Unidas, cerraría las embajadas de su país en Alemania y en otras naciones antisemitas, ajustaría los horarios escolares al calendario judío y ordenaría que acabara el flujo hacia la Autoridad Palestina de fondos, bienes, agua, electricidad y comunicación…
En la inspección que hace uno de los líderes nazis a los cargamentos destinados a la construcción de los que serían los campos de exterminio durante la Segunda Guerra Mundial, que Vasili Grossman describe en Vida y destino, observa que hay allí “piezas sueltas de varios mecanismos, canalones, cintas transportadoras aún sin montar, tubos de diferentes diámetros, sopladores y ventiladores, trituradoras de huesos…” Feiglin reconoce admirar el orden público del régimen nazi. ¿Y qué opina de su eficacia como maquinaria de destrucción? El líder más extremista del Likud considera que el sionismo es racista y que los palestinos son inferiores. Que sus antepasados fueran víctimas del gran verdugo nazi no parece importarle demasiado. ¿Cuáles son, pues, las lecciones que Feiglin extrae de la historia? La víctima y el verdugo. El País 17 diciembre 2008.

martes, 16 de diciembre de 2008

Ignorancia.

Tres clases hay de ignorancia: no saber lo que debiera saberse, saber mal lo que se sabe, y saber lo que no debiera saberse. Fraçois de la Rochefoucauld. Escritor francés. 1613-1680.

lunes, 15 de diciembre de 2008

Fotografías.

Las fotografías del antaño lejano y del antaño cercano no nos miran y no se cansan de mirarnos, siempre con la misma pregunta “¿Y qué pasó después?”. A veces las respondemos pera la respuesta no les llega. Están aislados, inmóviles, sordos los pobres. Hay fotos que nos dejan amor, afectos, lealtades, simpatía, y no las podemos olvidar. Otras que nos dejan odios, enconos, fobias, desdenes; tampoco las podemos olvidar. A las primeras las encuadramos; a las segundas, las archivamos con otros desperdicios.
Hay poses de familia que son una síntesis de tiempo, pero también hay instantáneas que son apenas el pellizco de un pasado minúsculo. También nosotros, móviles y vivientes, vamos de a poco metiéndonos en fotos, y en ellas (por ahora) nos miramos a nosotros mismos. Pero los habitantes del 2008 o el 2009 mirarán nuestros rostros fotografiados y desde ellos les preguntaremos “¿Qué pasó después?” Qué cosa, ¿no? Mario Benedetti. Vivir adrede.

sábado, 13 de diciembre de 2008

El miedo.


No se juega con el miedo porque el miedo puede ser un arma de defensa propia, una forma inocente o culpable de coraje. El miedo nos abre los ojos y nos cierra los puños y nos mete en el riesgo desaprensivamente. Andamos por el mundo con el miedo a cuestas como si fuera un pudor obligatorio o en su defecto una variante del fracaso. Tal vez sea el mandamiento o quizás el mandamiento de alguna desconocida ley, de un dios cualquiera. Por las dudas, una buena fórmula contra el miedo puede ser la que dejó escrita el bueno de Pessoa: “Espera lo mejor y prepárate para lo peor”. Mario Benedetti. Vivir adrede.

viernes, 12 de diciembre de 2008

Enfadarse

Cualquiera puede enfadarse, eso es algo muy sencillo. Pero enfadarse con la persona adecuada, en el grado exacto, en el momento oportuno, con el propósito justo y del modo correcto, eso, ciertamente, no resulta tan sencillo.

jueves, 11 de diciembre de 2008

Oscar Wilde.


No voy a dejar de hablarle sólo porque no me esté escuchando. Me gusta escucharme a mi mismo es uno de mis mayores placeres. A menudo mantengo largas conversaciones conmigo mismo, y soy tan inteligente que a veces no entiendo ni una palabra de lo que digo. Oscar Wilde. Dramaturgo y novelista irlandés. 1854-1900

miércoles, 10 de diciembre de 2008

Jaén.


Jaén. Antonio Machado, que amó tanto estos paisajes, se dio cuenta de que sólo la repetición transmitía su belleza severa y monótona: “Campo, campo, campo./ Entre los olivos/ los cortijos blancos”. Olivos, olivos, olivos: líneas rectas de copas idénticas, redondas, de un verde grisáceo, perdiéndose como las líneas imaginarias de la perspectiva. Y a lo lejos, en el punto de fuga, en el horizonte, las sierras azules, el límite del mundo, azul contra el azul del cielo, a veces recortado contra él, a veces fundido en una bruma casi marítima. Territorio interior. Antonio Muñoz Molina.

martes, 9 de diciembre de 2008

Monsaraz. Alentejo. Portugal.

En pleno corazón de la región portuguesa del Alentejo, a pocos kilómetros de la frontera española, regada por el Guadiana y rodeada de tierras salpicadas de alcornoques y olivos, poblada en la antigüedad por romanos, árabes, judíos y la Orden del Temple, encerrada entre sus murallas, encaramada en un cerro que ofrece preciosas vistas, se encuentra la villa de Monsaraz. Está considerada por muchos, y es verdad que no exageran, quizás el pueblo más bonito de Portugal.

Monsaraz. Alentejo. Portugal.

Monsaraz. Alentejo. Portugal.

Monsaraz. Alentejo. Portugal.

Monsaraz. Alentejo. Portugal.

Monsaraz. Alentejo. Portugal.

viernes, 5 de diciembre de 2008

Catedrales.


La más fuerte impresión de nuestra primera juventud –teníamos a la sazón siete años-, de la que conservamos todavía un vivido recuerdo fue la emoción que provocó, en nuestra alma de niño, la vista de una catedral gótica(…). Después, la visión se transformó, el hábito modificó el carácter vivo y patético de aquel primer contacto, pero jamás hemos podido dejar de sentir una especie de arrobamiento ante estos bellos libros de imágenes que se levantan en nuestras ciudades y que despliegan hacia el cielo sus hojas esculpidas en piedra. Fulcanelli. El misterio de las catedrales.

jueves, 4 de diciembre de 2008

Maldad


Lo más atroz de las cosas malas de la gente mala es el silencio de la gente buena. Mahatma Gandhi.

miércoles, 3 de diciembre de 2008

Acercar la política al ciudadano.


¿Cómo acercar la política al ciudadano?; ¿cómo exorcizar esa impresión de que todos los políticos mienten por igual y por lo tanto es lo mismo votar por unos o por otros, o no votar?; ¿con qué anticuerpos inmunizar contra la indiferencia?: restituyendo al ciudadano soberanía y poder, garantizándole la decisión sobre la cosa pública. Sólo quien cuenta con los datos informativos esenciales, sin su manipulación, puede decidir con conocimiento de causa. Aquel que es manipulado o engañado no podrá elegir nada, o incluso peor: será inducido a deliberar algo diferente a lo que se imagina decidir. Flores D’Arcais. El soberano y el disidente.

martes, 2 de diciembre de 2008

La libertad.

Si tengo una piedra en la mano, soy libre de conservarla o de tirarla, pero si la tiro a lo lejos ya no puedo ordenarle que vuelva para seguir teniéndola en la mano. Lo serio de la libertad es que cada acto libre que hago limita mis posibilidades al elegir y realizar una de ellas.- Fernando Savater - Ética para Amador.

lunes, 1 de diciembre de 2008

Felicidad.


Queremos ser más felices que los demás, y eso es dificilísimo, porque siempre les imaginamos mucho más felices de lo que son en realidad. Montesquieu.

viernes, 28 de noviembre de 2008

Desasosiego

Salí a primera hora con el carrito de la compra lleno de botellas vacías, pero cuando llegué al contenedor y arrojé la primera por ese raro agujero que parece un esfínter, me pareció escuchar un ¡ay!, como si hubiera golpeado a alguien en la cabeza. Volví a casa angustiado, sin haberme desprendido del resto. Hay tanta pobreza, tanta gente viviendo entre cartones, durmiendo en cajeros automáticos, quizá en contenedores... Tomo los ansiolíticos que usted me prescribió, sí, y la verdad es que cuando me hacen efecto le dan por el culo a la realidad. Pero incluso sedado me duele la falta de compromiso, y ese dolor me llena de una inquietud inmóvil, de una impaciencia exánime. Así que volví al contenedor de las botellas, abrí el esfínter y me asomé. No se veía nada. Pregunté si había alguien dentro. Silencio. Quizá no había nadie, o quizá lo había dejado en el sitio de un botellazo. No llamé al 112, lo que me llenó de contrición, de culpa, como cuando estoy reparando el enchufe de la cocina, que no nos hemos electrocutado de milagro, y me da por pensar en la cisterna del retrete, que gotea desde hace una semana (estoy muy concienciado también con el tema del agua). Pero hay tantas cosas a las que atender... ¿Debería preocuparme lo de Lukoil?, por ejemplo. Quiero ser un buen ciudadano, una buena persona, pero ¿y mi derecho a gozar de un poco de tranquilidad? Ahora bien, si Lukoil es de la mafia rusa, ¿no deberíamos hacer algo? También tengo una montaña de medicinas caducadas, que he de llevar a un lugar de la farmacia que se llama punto no sé qué. El mes pasado, por cierto, compré en la Red una caja de Viagra de la que luego dijeron en la tele que era falsa, aunque me funcionó. ¿Tengo erecciones falsas? ¿En qué se distinguen de las verdaderas? Esto no es vida, doctor, deme algo, pero no algo que me sede, algo que me mate. Desasosiego. Juan José Millás. El País 28/11/2008.

Nostalgias.


De vez en cuando es bueno ser consciente de que hoy, de que ahora, estamos fabricando las nostalgias que descongelarán algún futuro. Mario Benedetti.

jueves, 27 de noviembre de 2008

El sexo.

El ser humano es el único animal que puede obsesionarse con el sexo, porque las hembras pueden mantener relaciones sexuales fuera del período fértil y porque la imaginación se convierte en sustituto del estímulo. El resto de los animales no se pueden permitir este exceso. Si estuvieran ocupadas con el sexo durante todo el año serían presa fácil para sus predadores. Para ellos es más seguro concentrar toda la función procreadora en un período corto de tiempo. José Antonio Marina. Aprender a convivir.

miércoles, 26 de noviembre de 2008

Información verdadera.


“Los ciudadanos deben tener una capacidad real de premiar o castigar a los políticos; si éstos disponen de mayor o mejor información que los votantes, su control se hará difícil. El control democrático depende de que los ciudadanos dispongan de información verdadera y en tiempo, para atribuir responsabilidades a sus representantes.” José Mª Maravall. El control de los políticos.

martes, 25 de noviembre de 2008

Principios morales laicos.

Principios morales laicos. “El espejismo de Dios” del biólogo Richard Dawkins:

No hagas a otros lo que no quieras que te hagan.
No pases por alto, la maldad ni te acobardes al administrar justicia, pero disponte siempre a perdonar el mal hecho si media el arrepentimiento.
Prueba todas las cosas: revisa tus ideas frente a los hechos y prepárate para descartar incluso las creencias más arraigadas.
Respeta el derecho de los demás a estar en desacuerdo contigo.
Fórmate opiniones independientes basadas en tu razón y en tu experiencia: no permitas ser manejado.
Cuestiónalo todo.
Disfruta de tu vida sexual (en tanto no hagas daño a nadie) y deja a los demás que disfruten de la suya.
No adoctrines a tus hijos. Enséñales cómo pensar por sí mismos y cómo estar en desacuerdo contigo.

viernes, 21 de noviembre de 2008

El hombre que aprendió a ladrar.

Lo cierto es que fueron años de arduo y pragmático aprendizaje, con lapsos de desaliento en los que estuvo a punto de desistir. Pero al fin triunfó la perseverancia y Raimundo aprendió a ladrar. No a imitar ladridos, como suelen hacer algunos chistosos o que se creen tales, sino verdaderamente a ladrar. ¿Qué lo había impulsado a ese adiestramiento? Ante sus amigos se auto flagelaba con humor: "La verdad es que ladro por no llorar". Sin embargo, la razón más valedera era su amor casi franciscano hacia sus hermanos perros. Amor es comunicación. ¿Cómo amar entonces sin comunicarse? Para Raimundo representó un día de gloria cuando su ladrido fue por fin comprendido por Leo, su hermano perro, y (algo más extraordinario aún) él comprendió el ladrido de Leo. A partir de ese día Raimundo y Leo se tendían, por lo general en los atardeceres, bajo la glorieta y dialogaban sobre temas generales. A pesar de su amor por los hermanos perros, Raimundo nunca había imaginado que Leo tuviera una tan sagaz visión del mundo. Por fin, una tarde se animó a preguntarle, en varios sobrios ladridos: "Dime, Leo, con toda franqueza: ¿qué opinas de mi forma de ladrar?". La respuesta de Leo fue bastante escueta y sincera: "Yo diría que lo haces bastante bien, pero tendrás que mejorar. Cuando ladras, todavía se te nota el acento humano”. El hombre que aprendió a ladrar. Mario Benedetti.

jueves, 20 de noviembre de 2008

El mentiroso.


Creemos que el mentiroso está contando sinceramente su verdad y, al creerle, cedemos parte de nuestra libertad en función de la mentira. Pasamos a estar sometidos a la voluntad del otro. Michael P. Lynch. La importancia de la verdad para una cultura pública decente.

miércoles, 19 de noviembre de 2008

El sentido de la vida.


“El hombre necesita ideas y convicciones generales que le den sentido a su vida y le permitan encontrar un lugar en el universo. Puede soportar las más increíbles penalidades cuando está convencido de que sirve para algo; pero en cambio se siente aniquilado cuando, en el colmo de todas sus desgracias, tiene que admitir que está tomando parte en un cuento contado por un idiota”. C.G. Jung, Acercamiento al inconsciente, siquiatra y pensador.

martes, 18 de noviembre de 2008

Los absolutos.


No existe lo que llamamos realidad objetiva o "mundo real". No existen los absolutos. El rostro de tu peor enemigo puede ser el de mi mejor amigo. Algo que parece una tragedia para alguien puede contener la semilla de una magnífica oportunidad para otro. Lo que separa de veras a las personas alegres y optimistas de las sumidas en la desdicha es la forma de interpretar y procesar las circunstancias de la vida.

lunes, 17 de noviembre de 2008

Luchar.


En la juventud tenemos mucho valor, pero aún no hemos aprendido a luchar. Después de mucho esfuerzo, aprendemos a luchar, pero entonces ya no tenemos el mismo valor para combatir. Por causa de esto nos volvemos contra nosotros mismos y pasamos a ser nuestro peor enemigo. - Paulo Coelho, El peregrino de Compostela.

viernes, 14 de noviembre de 2008

La perdición personal.


Todos llevamos dentro nuestro propio infierno, una posibilidad de perdición que es solo nuestra, un dibujo personal de la catástrofe. ¿En qué momento, por qué y cómo se convierte el vagabundo en vagabundo, el fracasado en un fracasado, el alcohólico en un ser marginal? Seguramente todos ellos tuvieron padres y madres, y tal vez incluso fueron bien queridos; sin duda, todos creyeron alguna vez en la felicidad y en el futuro, y fueron niños zascandiles, y adolescentes de sonrisas tan brillantes como la de Stalin. Pero un día algo fallo y venció el caos.

La perdición personal es insidiosa: se agazapa en nuestro interior como una enfermedad tropical, latente y furtiva, aguardando durante años o puede que décadas a que bajemos la guardia, a que se nos agrieten las defensas, para poner en marcha entonces el mecanismo de la demolición. -Rosa Montero- La hija del Canibal.

jueves, 13 de noviembre de 2008

Gandhi.


Dicen que soy héroe, yo débil, tímido, casi insignificante, si siendo como soy hice lo que hice, imagínense lo que pueden hacer todos ustedes juntos. Mahatma Gandhi.

miércoles, 12 de noviembre de 2008

Malditas palabrabras.

Malditas palabras, esas que nos confunden y nos engañan. Esas que están llenas de eufemismos. Esas que llaman “tercer mundo” a las regiones del mundo donde sus habitantes mueren de hambre y enfermedades antes de que sepan caminar. Esas que llaman “fondos de ayuda al desarrollo, FAD” a las ayudas económicas, que países como el nuestro, utilizan para tratar de acallar sus conciencias, y tal vez también las nuestras. Esos mismos fondos que han servido para sufragar en parte (300.000 euros de los casi 20 millones del coste total) la obra del artista Barceló en una cúpula de la sede de la ONU en Ginebra. Gasto que ante el escándalo ha quedado justificado por nuestros gobernantes con estas palabras: “esta obra de arte es una contribución a la promoción de los derechos humanos y el multilateralismo “.
Por desgracia el hambre, la miseria y la injusticia están llenas de verdades, de tristes verdades, las que nosotros tratamos de tapar con las mentiras de las palabras. Sebastián Navarrete Molina. 12 de noviembre de 2008.

martes, 11 de noviembre de 2008

Felicidad


Los hombres olvidan siempre que la felicidad humana es una disposición de la mente y no una condición de las circunstancias. John Locke (1632-1704) Filósofo inglés.

lunes, 10 de noviembre de 2008

La fotografía.


Si no te sientes en perfecta comunión con la naturaleza, si no experimentas un placer inmenso, una serena tranquilidad al pasear por el bosque, por la montaña o a orillas del agua, al notar la vida que palpita a tu alrededor, bajo tus pasos, al ver las idas y venidas de los pájaros, al sentir el frescor del aire sobre tu piel, al respirar a pleno pulmón el olor de las hojas en descomposición, entonces es inútil que te compres el equipo fotográfico. Ya que si estas en desacuerdo con la naturaleza, no tendrás ningunas ganas de conocerla mejor, de observarla, de comprenderla ni de respetarla, y mucho menos de glorificarla al convertirla en imagen. Serge Dominique Simón, fotógrafo.

domingo, 9 de noviembre de 2008

Recuerdo.


Si alguna vez sintieras todavía,
cuando yo me haya muerto,
arder como una llama temblorosa
en tu alma mi recuerdo,
piensa que mas allá de los espacios infinitos,
perdida entre las llamas infernales
yo te sigo queriendo. - José Bergamín

viernes, 7 de noviembre de 2008

Gobernantes y frustración.

“La política en democracia es un sistema armonioso de frustraciones mutuas. En una sociedad democrática la garantía de los ciudadanos reside en al frustración de sus gobernantes. El peligro para los ciudadanos no deriva tanto de que el Gobierno no pueda cumplir íntegramente su programa, sino de que pueda hacerlo. Es el propio instinto de conservación de la sociedad el que exige que los programas de gobierno de los partidos queden parcialmente incumplidos. Si no fuera así, la estabilidad de la sociedad quedaría gravemente comprometida.” - EL PAÍS, viernes 10 de mayo de 1996. Javier Pérez Royo. Sistema armonioso de frustraciones mutuas.

jueves, 6 de noviembre de 2008

Locura.


La verdadera locura quizá no sea otra cosa que la sabiduría misma que, cansada de descubrir las vergüenzas del mundo, ha tomado la inteligente resolución de volverse loca. Enrique Heine.

miércoles, 5 de noviembre de 2008

Obama.


"Siembras un pensamiento, cosechas una acción. Cosechas una acción, siembras un hábito. Siembras un hábito, cosechas un carácter. siembras un carácter, cosechas un destino." Anónimo. Miércoles 5 de noviembre de 2008, el ciudadano afroamericano Barack Obama se convertirá en el 44 presidente de los Estados Unidos de América.

martes, 4 de noviembre de 2008

La idiotez.

La idiotez es una enfermedad extraordinaria, no es el enfermo el que sufre por ella, sino los demás. Voltaire (1694-1778) Filósofo y escritor francés.

lunes, 3 de noviembre de 2008

La salvación.


Un día de tormenta estaba un obispo cristiano en su catedral, y se le acercó una mujer no cristiana y le dijo: -Yo no soy cristiana. ¿Existe salvación del fuego del infierno para mí? El obispo miró y respondió: -No, sólo se salvan los bautizados en el agua y en el espíritu. Y mientras aún hablaba, un rayo cayó con estruendo sobre la catedral, y ésta fue invadida por el fuego. Y los hombres de la ciudad llegaron corriendo y salvaron a la mujer, pero el obispo se consumió, alimento del fuego. El relámpago. Gibrán Salil Gibrán.

viernes, 31 de octubre de 2008

Códice castellano.

No tener deudas ni amoríos, ni pleitos, ni riñas, ni repartos de bienes con los parientes, contentarse con poco, no esperar nada de los grandes, acomodar los deseos a la realidad. Vivir honradamente y sin ambiciones, entregarse sin escrúpulos a la devoción, dominar las pasiones, hacerlas obedientes. Conservar el espíritu libre y el juicio firme es esperar en casa, con gran sosiego, la muerte. (De un códice castellano del siglo XVI)

jueves, 30 de octubre de 2008

Proyectos comunes.


El deseo individual nos separa, los proyectos comunes nos unen. Saint-Exupèry escribe en una de sus obras: "Haz que edifiquen juntos una torre, y los convertirás en hermanos. Pero si quieres que se odien, arrójales comida. José Antonio Marina. Aprender a convivir.

miércoles, 29 de octubre de 2008

La derecha.

“No hay censura explícita. Tampoco existen listas negras. Pero lo que es cierto es que la derecha lleva años desarrollando su eterna estrategia: callar y aislar a los demás. Es su manera de hacernos creer a todos que somos una minoría, que somos unos pocos, cuando lo cierto es que la minoría, poderosa y rica, pero minoría, son ellos. El resto somos la mayoría y sería imperdonable dejarse intimidar y permanecer inmóviles”. Unas declaraciones de Tim Robbins sobre el cine en EEUU.

martes, 28 de octubre de 2008

Los regalos.

Una vez, un maharajá que tenía fama de ser muy sabio, cumplió cien años. El acontecimiento fue recibido con gran alegría, ya que todos querían mucho a su gobernante. En el palacio se organizó una gran fiesta para aquella noche y fueron invitados poderosos señores del reino y de otros países.
Llegó el día, y una montaña de regalos se amontonó en la entrada del salón, donde el maharajá iba a saludar a sus invitados.
Durante la cena, el maharajá pidió a sus sirvientes que separaran los regalos en dos grupos: los que tenían remitente y los que no se sabía quién los había enviado.
A los postres, el rey mandó traer todos los regalos en dos montones. Uno de cientos de grandes y costosos regalos, y otro más pequeño, con sólo una decena de presentes.
El maharajá empezó a abrir los regalos del primer montón y fue llamando a quien se los había enviado. A cada uno, lo hacía subir al trono y le decía:"Te agradezco tu regalo, te lo devuelvo y estamos como antes". Y le devolvía el regalo, sin importar qué fuera.
Cuando terminó con el primer montón, se acercó a la segunda montaña de regalos y dijo: "Estos regalos no tienen remitente. Estos sí los voy a aceptar porque no me obligan a nada y, a mi edad, no es bueno contraer deudas". - Cuentos para pensar. Jorge Bucay.

lunes, 27 de octubre de 2008

Civilizados.


"Mírelos. Tan civilizados dentro de lo que cabe, mientras no les cueste demasiado esfuerzo. Pidiendo las cosa por favor, quienes todavía lo hacen... Métalos en un cuarto cerrado, prívelos de lo imprescindible, y los verá destrozarse entre sí" ." Arturo Pérez-Reverte. El Pintor de batallas.

jueves, 23 de octubre de 2008

La hipoteca.


Y es que hemos dejado de ser ciudadanos y nos hemos convertido en clientes, clientes de las constructoras y de las empresas multinacionales que gastan miles de millones en convencernos de que si no les compramos esa segunda residencia o este coche que nos hipotecará la vida mucho más de lo que ya la tenemos hipotecada, no perteneceremos al grupo de los ricos y famosos cuyas vidas tanto nos interesa y cuyos descalabros con tanta atención seguimos durante el tiempo que nos deja libre el trabajo que hacemos a todas horas para pagar las hipotecas, o durante las horas que pertenecemos en las colas de las carreteras para alcanzar el chalet en cuestión y los que gastamos en abrirlo, limpiarlo, adecentarlo y volver a cerrarlo al día siguiente para, después de más horas de carretera, llegar a casa exhaustos el domingo por la noche listos para volver a comenzar al cabo de unas horas. Es un modelo de vida que nos ha seducido, difícil de comprender, pero así vivimos y así creemos que hemos alcanzado la felicidad. Es nuestra economía neoliberal que hemos abrazado sin tomarnos la molestia de analizar y sin darnos cuenta de que, por más casa y coches que tengamos las hipotecas que hay que pagar a fin de mes nos calvan en la tierra que hemos adquirido, a la que tenemos que volver sábados y domingos y días de guardar porque nuestro presupuesto ya no alcanza para conocer otros mundos, ni siquiera para quedarnos en casa tranquilamente y pasear por la ciudad sin que nos remuerda la conciencia por no aprovechar lo que con tanto esfuerzo estamos pagando. Por estos pagos y por otros que vendrán sacrificamos vida profesional y familiar, el buen humor, los ocios diversos, y tenemos que soportar que en el trabajo se cercenen nuestros derechos laborales si no queremos perder un empleo al que estamos ligados para poder atender esas famosas hipotecas que tanta riqueza proporciona a los bancos y a las multinacionales. Rosa Regás. Diario de una abuela de verano.

miércoles, 22 de octubre de 2008

Terrorismo y justicia.


“La base de la civilización debería ser la justicia. Su fracaso es que hemos aprendido a mirar para otro lado. Cuando estalla un coche, la gente se siente aliviada de que el muerto no sea suyo. Y es natural, no lo critico”. Miguel Tomás-Valiente. Autor de El hijo ausente. Su padre Francisco Tomas y Valiente fue asesinado por ETA el 14 de febrero de 1996.

martes, 21 de octubre de 2008

Justicia.


"Cuando se habla de conciencia, hermandad y justicia en el mundo, alguna gente dice que eso solo son palabras que expresan sueños. Pero no solo las pesadillas pueden hacerse realidad, también pueden materializarse los sueños”. “La justicia consiste en tener respeto por el derecho de la gente a vivir como quiera”. Naguib Mahfuz.

lunes, 20 de octubre de 2008

El escritor y el lector.

"El escritor hace sólo el cincuenta por ciento del trabajo, y el lector, proyectando su vida en lo que lee, escribe el otro cincuenta por ciento. Por eso no hay dos ejemplares de la misma novela iguales, porque no hay dos lectores iguales". Arturo Pérez-Reverte.

jueves, 16 de octubre de 2008

Progresar.


El niño pequeño nos enseña inequívocamente que estamos sometidos a este doble dinamismo del placer y de la superación. Cuando nace, le importa exclusivamente satisfacer su necesidad de bienestar. Quiere estar bien alimentado, calentito, limpio, acogido. Pero antes de los tres años dice un frase que delata en su interior el impulso incansable de la especie humana. Dice: "Mamá, mira lo que hago". Se trata de una petición muy peculiar. No pide otro dulce, otro juguete, otro capricho, sino algo que pertenece a una categoría absolutamente distinta. Quiere sentir que progresa y que ese avance es reconocido por una persona significativa para él. Así seguimos toda la vida. Conviene que no lo olvidemos: necesitamos siempre sentir que progresamos. José Antonio Marina. Aprender a convivir.

La realidad.


El rey estaba enamorado de Sabrina, una mujer de baja condición a la que había convertido en su última esposa.
Una tarde, mientras el rey estaba de cacería, llegó un mensajero para avisar de que la madre de Sabrina estaba enferma. Pese a que estaba prohibido usar el carruaje personal del rey, infracción que se pagaba con la cabeza, Sabrina subió al coche y corrió junto a su madre.
A su regreso, el rey fue informado de la situación.
-¿No es maravillosa? -dijo-. Esto es verdadero amor filial. No le ha importado jugarse la vida para cuidar de su madre. ¿Es maravillosa!
Otro día, mientras Sabrina estaba sentada en el jardín del palacio comiendo fruta, llegó el rey. La princesa lo saludó y después le dio un mordisco al último melocotón que le quedaba en la cesta.
-¡Parecen buenos! -dijo el rey.
-Lo son -dijo la princesa. Y, alargando la mano, le cedió a su amado el último melocotón.
-¡Cuánto me ama! -comentó después el rey-.Renunció a su propio placer para darme el último melocotón de la cesta. ¿No es fantástica?
Pasaron algunos años y, a saber por qué, el amor y la pasión desaparecieron del corazón del rey.
Sentado junto a su amigo más íntimo, le decía: "Jamás se comportó como una reina. ¿Acaso no desafió mi prohibición utilizando mi carruaje? Es más, recuerdo que una vez me dio a comer una fruta mordida".

La realidad es siempre la misma. Y lo que es, es. Sin embargo, como en el cuento, el hombre puede interpretar una situación de una manera o de la contraria.

Si lo que ves se ajusta "a medida" con la realidad que a ti más te conviene....¡Desconfía de tus ojos! - Cuentos para pensar. Jorge Bucay.

Reservas de vida.


La mayoría de la gente vive -ya sea física, intelectual o mentalmente- en un círculo muy restringido de sus posibilidades. Todos nosotros tenemos reservas de vida en las que ni siquiera soñamos. William James.

miércoles, 15 de octubre de 2008

Oda de Horacio


No intentes saber cuál será el último día
que a mí, que a ti
los dioses han concedido.
No hagas juegos astrológicos
más vale sufrir lo que venga
sea lo que sea
tanto si Júpiter te ha otorgado vivir más inviernos
como si éste fuera el último
sé sensato: saborea la vida,
ya que la vida es breve
acorta la larga esperanza.
Mientras hablamos
habrá huido envidioso el tiempo
goza el día de hoy y
no confíes en el mañana.

Oda del libro I de Horacio

lunes, 13 de octubre de 2008

La Princesa Inca. Segunda y última parte.


A los que se quedaron dormidos en el nunca, a los que sueñan sus verdades y se las niegan, a los que tiene mucho miedo, y lloran por cualquier cosa, y se ocultan la cara de vergüenza. A los tímidos, a los solos, a los raros, a los que dudan y dudan y les llaman inmaduros, débiles. A los que duermen en al fría cama del psiquiátrico, a las madres que cogen la mano de su hijo ingresado. Os digo que no vendan verdades, que la verdad no existe, la verdad y la razón son creaciones del hombre, para doler, para medir. Hay que luchar contra el silencio, y la ignorancia, Somos personas, no somos enfermos. ¿Quién tiene la Verdad absoluta, La Realidad Absoluta?... Que la muestre, que la enseñe si puede… ¡Es mentira, mentira, no existe! A los que llevan cicatrices de haberse rajado las venas, a los que consiguieron no rajárselas, a los que le paraliza la angustia, les paraliza para ser, amar, soñar. A los que llaman vagos, idiotas, locos, débiles. No escuchéis la voz de los que viven sólo para afirmar, controlar, o los que saben adónde van, dónde están, quiénes son, los que llevan la frente alta y no les tiembla la voz. A los que la ansiedad-la sociedad les hace fumar dos paquetes diarios, a los que no son sociables, ni aptos, ni lúcidos, no extrovertidos, ni empáticos, ni asertivos, ni normales. A los que nunca superarán un test psicotécnico, a los que llevan medicación en el bolso y el monedero vacío. A los que ahora están atados a una cama y no nos oyen, a los psiquiatras que abrazan a sus pacientes y pidieron alguna vez consejo al que llamaron esquizofrénico. A los que tenemos certificado de disminución y leemos a Lorca y a Nietzsche y lo que haga falta. A los que no soportaron el túnel y se fueron para siempre, a los que atravesamos cada día el túnel agarrados a las paredes negras. A todos los que saben o quieren escucharnos, y no se fían sólo de los manuales, libros, tesis, estudios y estadísticas. A los psicólogos que dan besos. A los que hemos pasado ya el infierno y el cielo y no queremos volver nunca más allí. A los que roban dolor y devuelven en sonrisas, dice Sabina. Y sobre todo, a todas esas pupilas dilatadas de tanta química que miran aturdidas y absortas pero tienen luz más hermosas: “Que no existe locura sino gente que sueña despierta”. Cristina Martín – Princesa Inca, es miembro de Radio Nikosia.